Como fabricante, tiene la responsabilidad de asesorar a sus clientes sobre la forma en la que utilizar las sustancias químicas de forma segura.

La principal forma de hacerlo es a través de la ficha de datos de seguridad (SDS).

El Reglamento de REACH define los casos en los que se necesita una ficha de datos de seguridad, así como su contenido y formato. La parte «ampliada» hace referencia al escenario de exposición (EE) que debe facilitarse si se registra una sustancia peligrosa en una cantidad anual superior a 10 toneladas. El escenario de exposición describe el modo en que puede controlarse la exposición de las personas y el medio ambiente a una sustancia para garantizar que esta se use de manera segura. El formato del escenario de exposición no se define en el REACH, pero las partes interesadas han colaborado para armonizar la maquetación y las frases utilizadas.

Para saber más, consulte la guía interactiva sobre fichas de datos de seguridad y escenarios de exposición de la ECHA.

Comunicación ascendente en la cadena de suministro

Sus clientes tienen el derecho y, en algunos casos, la obligación de comunicar información de forma ascendente dentro de la cadena de suministro. Tienen derecho a poner el uso en conocimiento de su distribuidor por encima en la cadena de suministro, con el objetivo de que, finalmente, dichos usos queden cubiertos por el registro. Esta comunicación también puede realizarse a través de organizaciones del sector por medio de un mapa de uso del sector.

Sus clientes también tienen la obligación de comunicar de forma ascendente la información nueva sobre propiedades peligrosas, independientemente de los usos involucrados, y cualquier otra información que pueda poner en entredicho la idoneidad de las medidas de gestión de riesgos identificadas en la ficha de datos de seguridad que les fue suministrada. Por esta razón, en su calidad de fabricante, debe disponer de mecanismos para facilitar esta comunicación ascendente.